El Viagra y Don Juan

     Un Don Juan o Casanova retirado es el protagonista de la hermosa novela de Tomás Segovia, Cartas de un jubilado (Ediciones Sin Nombre, 2010), en la que el narrador rememora sus aventuras y su fidelidad al amor y al deseo a través de una serie de misivas que cruza con una de sus ex-amantes. Y es que tanto Don Juan como Casanova siempre tuvieron memoria para saber lo que era importante. Ya fuera para hacer la relación de sus conquistas eróticas, ya fuera para someterse a un examen de conciencia al final de sus vidas y pedir el perdón divino –en el caso de Don Juan–, o la sonrisa de sus contemporáneos –como Casanova–. No conocieron a la escritora Hélène Cixous, pero habrían coincidido con ella al recordar que el “verdadero sexo humano es el corazón”.

Columna *A la sombra de los deseos en flor*, revista Domingo de El Universal, 23 de septiembre de 2012 http://www.domingoeluniversal.mx/columnas/detalle/El%20Viagra%20y%20Don%20Juan-931

 

 

El Viagra y Don Juan

Ana Clavel

 

Circula en la red esta frase atribuida a Drauzio Varella, doctor brasileño popular por su sentido del humor y la ironía en materia de divulgación médica: “’En el mundo actual se está invirtiendo cinco veces más en medicamentos para la virilidad masculina y silicona para mujeres, que en la cura del Alzheimer. En algunos años, tendremos viejas de tetas grandes y viejos con el pene duro, pero ninguno de ellos se acordará para qué sirven”.

Mucho se ha dicho sobre la “pastilla azul”, sus pros y sus contras. Por mi parte recuerdo a un caballero que concluyó un encuentro amoroso con la mandíbula amoratada. Momentos antes de la cita había tomado Viagra y de pronto azotó contra el piso, permaneciendo inconsciente varios minutos. Ya se imaginarán el susto de la dama. Días después, ella no podía evitar una risita de compasión cada vez que veía la quijada de tonos violáceos, mientras él sólo desviaba la mirada.

Por supuesto, la firma comercial asegura que el Viagra es una panacea. Basta ver los anuncios de bienestar de parejas que por fin pueden llevar una existencia plena, ajenos del fantasma de la disfunción eréctil y la eyaculación precoz. No habla de posibles contraindicaciones: que a los pilotos les está prohibido ingerirlo seis horas antes de un vuelo porque puede adulterar la apreciación de colores como el azul y el verde, que son frecuentes los dolores de cabeza, que puede causar un ataque cardíaco o provocar una erección prolongada de incluso varias horas con el consecuente dolor. Finalmente, que aquellos hombres jóvenes que se lo administran por recreación y no por prescripción médica, corren el riesgo de depender del fármaco y ser incapaces de mantener una erección sin ingerirlo.

Programa de mano de Don Giovanni (Viena 1788)

Cuán lejos el arrojo del mítico Don Juan. Libertino legendario, nuestro personaje encuentra su primer forma literaria en el drama de Tirso de Molina, El burlador de Sevilla (1630). La obra debió de tocar fibras de las pulsiones colectivas porque a partir de entonces se sucederán numerosas versiones como la de Molière (1665), el poema épico de Lord Byron (1821), y la más conocida de todas: Don Juan Tenorio de José Zorrilla (1844). También afamada es la ópera de Mozart, Don Giovanni, en cuya primera representación en Praga (1787) se dice que estuvo presente ese otro Don Juan de la vida real, el veneciano Casanova. En tiempos recientes, una atrevida Brigitte Bardot protagonizó Si Don Juan fuese mujer (1973) y Johnny Deep y Marlon Brando estelarizaron el divertido filme Don Juan de Marco (1995), muestras de la vigencia del mito.

File:Don Juan 73.jpg                                 Don Juan DeMarco Poster

Dueño de un ímpetu sexual desaforado, no había mujer que resistiera  sus encantos o sus estratagemas. Porfiado de sí mismo y seductor, Don Juan no habría tenido necesidad de consumir Viagra en caso de vivir en nuestros días. Como tampoco la hubiera tenido Giacomo Casanova (1725-1798), quien confiesa que en cuestión de pasiones no fue más que una “víctima de sus sentidos”. Sus Memorias registran paso a paso su incansable batallar “en campos de pluma” y han inspirado numerosas cintas, como las espléndidas Casanova de Fellini (1976) y La noche de Varennes (1982).

http://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/f/f2/Calonghi.jpg/170px-Calonghi.jpg

Casanova por Alessandro Longhi

 Un Don Juan o Casanova retirado es el protagonista de la hermosa novela de Tomás Segovia, Cartas de un jubilado (Ediciones Sin Nombre, 2010), en la que el narrador rememora sus aventuras y su fidelidad al amor y al deseo a través de una serie de misivas que cruza con una de sus ex-amantes. Y es que tanto Don Juan como Casanova siempre tuvieron memoria para saber lo que era importante. Ya fuera para hacer la relación de sus conquistas eróticas, ya fuera para someterse a un examen de conciencia al final de sus vidas y pedir el perdón divino –en el caso de Don Juan–, o la sonrisa de sus contemporáneos –como Casanova–. No conocieron a la escritora Hélène Cixous, pero habrían coincidido con ella al recordar que el “verdadero sexo humano es el corazón”.


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